Con motivo de la apertura de la línea aérea de CzechAirlines entre Bilbao y Praga desde el pasado día 1 de junio, la responsable de la agencia de Turismo de la República Checa en España nos preparó un evento exclusivo con ayuda de los chicos de BlogOnBrands.
El objetivo era conocer más detalles sobre la cultura y la gastronomía checa y el formato elegido para hacerlo fue a través de una "cena de amigos" en el txoko Arbat de Bilbao en el que, de forma distendida descrubir platos tradicionales checos y alguna que otra curiosidad sobre el país. Los organizadores del evento lo llamaron #txokotxeko. Creo que no había un nombre más apropiado.
Llegamos entorno a las 7 de la tarde y tras los oportunos saludos y presentaciones, Marketa, nuestra anfitriona nos explicó los platos y productos que ibamos a preparar y degustar.
Como no podía ser de otra manera, en el evento checo hubo cerveza. Y es que ni Irlanda, ni Alemania ni Holanda. El país con mayor consumo de cerveza por persona es la República Checa con más de 150 litros por persona al año según Wikipedia (y más de 200 según Marketa)... a unos tres litros por persona a la semana. Casi nada.
No hay que olvidar que en Chequia esta la ciudad de Pilsen, una de las cunas de la cerveza y donde supuestamente nació (o eso dicen) el tipo de cerveza más consumido del mundo, la cerveza "lager". Checas son por ejemplo la Pilsner Urquell y la Budvar (la Budweiser original).
Curiosamente, también hubo lugar para el vino, y es que en la República Checa también tienen vino. Principalmente blanco ya que para el tinto necesitarían algo más de sol. La región vinícola por excelencia es Moravia y de allí era el vino que pudimos probar, de nombre "Moravino" (el nombre se las trae).
Y así, entre cervezas checas, vino de Moravia y una charla muy animada fuimos preparando nuestra particular cena checa, que se compuso de una sopa de champiñones, un guiso de carne, pimientos y cerveza llamado "gulash" y un "strudel" de postre.
Comenzamos con la sopa, al parecer, un plato indispensable en cualquier menú checo que se precie... y es que los checos son muy amigos de empezar la comida con una sopa, sobre todo cuando el frio aprieta.
En esta ocasión la preparamos de champiñones, muy especiada y la acompañamos de nata agría, que le daba un punto especial.
Entre plato y plato, continuabamos la animada charla con Marketa, todo un dechado de simpatía ella, y seguiamos aprendiendo, como quien no quiere la cosa, más detalles sobre la cultura checa. ¿Sabíais que no comen con pan? ¿Y que no es habitual saludarse con besos como en España?
El segundo plato fue un "gulash", un guiso tradicional checo que nos quedó de rechupete. En su preparación usamos cebolla, pimiento, carne (usamos cerdo), mucha paprika y cerveza negra. Creo que hablo en nombre de todos los presentes cuando digo que solo con la salsa y unas buenas barras de pan (de ese que no tienen en Chequia) nos podríamos alimentar durante una temporada :-)
¿Y de postre? Un magnifico strudel, un hojaldre relleno de manzana, pasas y nueces. ¡Excelente!
En resumen la experiencia fue muy enriquecedora. Pudimos disfrutar de primera mano de tres platos checos cocinados por nosotros mismos y disfrutamos de una velada muy interesante aprendiendo muchas curiosidades de la República Checa.
Nuestra anfitriona, Marketa, no podía ser más simpática, y los chicos de BlogOnBrands, que también estuvieron presentes, fueron encantadores.
No queda más que agradecer a CzechTourism y BlogOnBrands por habernos dejado participar de esta iniciativa y esperar a que pronto podamos subirnos a un avión y poder conocer de primera mano las tierras checas.
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